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Delirio

Lejos,

Olvidado,

Casi mediocre,

Es un recuerdo de los años partidos,

De las mocedades perdidas,

Del cielo absoluto e infinito.

Es un recuerdo tuyo y mío.

Como si la luna fuera de plata

Se refleja en su faz absoluta cual espejo,

Lo miras, lo miro de lejos,

Lo admiramos juntos…

Es el decir último de aquél señor viejo.

Háblame de azucenas y anturios,

Háblame de colores vivos,

De raíces,

De viajes,

De olvidos…

Háblame de ti.

En la aurora de mi mente están tus ojos,

En el ocaso tu risa,

En la noche tu cuerpo,

Cada uno con su ritmo tranquilo en la marea,

Cada uno distante,

Cercano,

Lejano,

Perdido.

Ante la obviedad de un mundo material

Persiste la idea de ti,

El recuerdo de mí,

La irrealidad de nosotros.

Tú eres un sueño mío,

Yo soy tu fantasía despierta

Y cada uno es al otro lo que el aire…

Vital,

Efímero,

Intocable.

Ahora me pierdo en tus risas de nube,

Ahora caen mis lágrimas de tormenta.

La luna antigua se ríe de nosotros…

No me ves,

No me buscas,

No me importa.

Adiós sueño nocturno,

Fantasía diurna,

Recuerdo de nada.

Adiós sentimiento lejano,

Persona sin rostro,

Irrealidad infinita.

Adiós…

Recuérdame.

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