Ir al contenido principal

Sara

El viento sobre mi espalda augura lluvia, la ventana abierta de la recámara refleja la luz del día en mi piel, tus manos se pasean lentamente por mi costado y me miras con esa sonrisa que tienes cuando recién has despertado. La noche se fue dejándonos detrás. El sol del medio día nos saluda entre la cortina. “Es tarde”, me dices en voz baja, “siempre es tarde”, respondo riendo y nos quedamos en silencio. Tu mano llega a mi cuello y me jalas para besarme aún sonriente.

Los días se nos van como agua, ¿lo has notado? Paso las noches en tus brazos y despierto cada vez más tarde, ¿o más temprano? Recuesto mi cabeza en las almohadas mientras tomo tu cuerpo despacio entre mis dedos y escucho tu respiración rítmica entrar y salir de mis oídos. Eres el fantasma de mis noches insomnes, la esencia dulce que embriaga mis sueños lúcidos.

Te levantas de la cama queriendo irte de mi lado y eso no lo puedo permitir, te jalo de un brazo para regresarte a las sábanas y caes sobre mí sin pensarlo. Estamos ahí de nuevo, una sobre la otra, sonriendo al sol de medio día con la piel descubierta.

“Bésame”, lo hago, “acaríciame, siénteme”, sigo tus instrucciones al pie de la letra y me encuentro de nuevo con el calor que tu piel irradia cuando estamos juntas. Las estrellas de tu cuerpo brillan en silencio por sí solas, centenas de pequeños astros oscuros que te cubren como al cielo nocturno, que sigo atenta con las yemas de los dedos esperando descubrir constelaciones perdidas. He encontrado la nebulosa que en mis sueños me llama, el lugar en el que existo cuando todo lo demás se pierde tras la luna, la encuentro en tu cadera mientras aferro un beso más a tu espalda. Escucho, hablas entre líneas, me dices entre poros todas esas cosas que de otra forma cuesta tanto decir, tú dices, yo hago, te sigo paciente mientras dictas el camino. Nos hemos perdido en un nudo de desnudos que puede terminar más allá del tiempo presente.

El olor del café persistente nos invita a levantarnos de la cama ahora que el medio día ha avanzado un poco más. “A veces me sabes a café”, te ríes de mí al levantarte de la cama, “en serio, tengo la firme creencia de que sabes a café tostado, si pudiera verterte en una taza, te tomaría todos los días al levantarme… eres adictiva…” Te ríes y te vas dejando al sol en mi espalda y al viento que augura lluvia recorriendo el cuarto, te vas a algún otro lado donde la realidad está presente y mis sueños estelares se quedan colgando de tu piel.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

A Gala

Te estás volviendo recurrente, cada vez que cierro los ojos veo los tuyos en vez de los míos. El bosque detrás de tus pupilas se hace real y yo me interno en tu búsqueda. Haz hablado conmigo de mil cosas que conoces y todas ellas han sido reales al despertar. Me pregunto si estarás ahí cuando me hagas falta... me has dicho que sí. Te he soñado como nunca, una vez tras otra en instantes inconexos que se vuelven obsesivos cuando abro los ojos y entiendo que no fueron en verdad. ¿Lo fueron? Ayer me dijiste que volverías, lo hiciste con tus labios contra mi oreja, mi subconsciente te creyó. Hoy desperté con el pecho vacío, como si algo me hubiese robado el aliento mientras dormía, recordé que estuviste en mis sueños... Todo lo que queda son preguntas con respuestas perdidas en el tiempo. Lo sé, está cerca...

The head of the war

Rampage, fury, a day goes nearby me and I feel nothing, sweet heat of rage running towards the brain inside the head of the war... does it hurt? Is it burning? Is it me or the clouds of greish green are rising above? The sound of steps into the fog, into the sea, between the sand, the sound a deep breath willing to lose a life in order to win a mile, the sound of a thousand thunders going through the sky, falling in the rupture of men shreding eachother apart. This is hell... the deepest bottom of an ocean of missunderstanding. Is the will of the brain bigger than the life of so many others? Is it bigger than all of us? How do you messure the size of you among us? Red and purple days, red and purple nights, red and purple thoughts, this little puppets follow the colors of a fabric that has lost it's meaning... they follow no reason, just a brain with an unclear purpouse and a greed bigger than all of us.

La muerte de K

Hay algo que necesito entender: ¿qué pasó? Por más que miro hacia atrás y busco una explicación tras otra, todo parece tan absurdo que no consigo dar paz a mi mente. Te he buscado como loco, por debajo de las piedras y entre las letras de las miles de cartas que he escrito para ti en mi cabeza. He intentado llamarte por las madrugadas frente a las olas del mar y no he conseguido respuesta. No lo sé, dónde te perdí, por qué no apareces... Mis pensamientos inconclusos navegan entre los recuerdos de una persona que parece desvanecerse cada vez más frente al espejo. Ayer no tenías frente, hoy ya no te veo los ojos, mañana quién sabe. Cuando desaparezca tu cuello empezaré a pensar que no hay remedio. ¿Sufriré? ¿Sabré que te has ido por completo cuando lo hagas? Vaya cosa curiosa. El hombre azul ponía en carpetas separadas las cartas escritas a diferentes amigos, organizaba con perfección su vida plasmada en memorias aparentemente inconexas, la ponía en los cajones de su escritorio y se pre...