Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de diciembre, 2011

...

Hace tanto tiempo que ha quedado el silencio que ahora se siente como una película de ectoplasma que permanece inerte en el aire. La observé con los oídos bien clavados en su respiración, penetraba el aire a su nariz, por la garganta, a los pulmones y yo lo escuchaba salir lentamente de su boca en palabras casi monótonas, ¿o será que yo no quería escucharlas? Ella hablaba y hablaba de la vida, del mundo, de las vueltas de fortuna... habla y hablaba entre mi silencio taciturno. La miraba a los ojos de cuando en cuando, la luz vivía en ellos desde hacía tanto tiempo que estoy segura de que ella había olvidado la primera vez que la vio. Palpé una predestinación al encuentro que no había podido prever. El silencio empezaba a escurrírseme por la piel y los oídos prestaban atención a los labios que se movían cadenciosamente. Me mantuve prendida de su articulación perfecta, de sus oraciones estéticamente fantásticas, de la boca que las iba recreando cuando picaban en la lengua fugaz. Repetí ...

El escape

Revolución miraba a la niebla apretando la taza de chocolate entre los dedos. Llevaban dos días escondidas en ese infonavit lejano y deshabitado, aún no estaban seguros de si alguien los había seguido o no. Sandoval ya había agotado todos sus contactos en el gobierno y ella no podía llamar a su familia para preguntar o los iban a denunciar. Fernanda se levantó del suelo para pararse junto a Revolución, ambas observaron a la niebla esperando no ver las sombras que tanto temían. Se miraban a los ojos los unos a los otros comk queriendo saber si todavía podían tenerse la fe con la que comenzaron. La guerra llevaba ya unos cuantos meses en curso, los militares deambulaban las calles como perros sedientos, el gobierno entero era una colmena de avispas asustadas. Los revoltosos habían desaparecido poco a poco, sólo La Voz seguía en la ciudad. - ¿A dónde nos vamos mañana? - Hay que regresar... - No podemos, nos van a matar si lo hacemos. - No saben dónde estamos, si regresamos aho...